PILATES Y FIBROMIALGIA
Los pacientes con síndrome de la fibromialgia pueden mejorar considerablemente su calidad de vida con una rutina de ejercicios físicos, con los cuáles además van a cambiar su estado de ánimo, y se va a paliar el dolor.
El pilates es la cinesiología de forma avanzada, proporcionando el estiramiento, permitiendo la recuperación de la longitud muscular funcional, posibilitando el alivio de las tensiones, el realineamiento de la postura y la mejora en la amplitud de los movimientos.
El Pilates puede ser considerado un entrenamiento físico y mental. El método proporciona sensación de bienestar, tranquilidad, conciencia corporal, optimiza la respiración, potencializa la capacidad respiratoria, promoviendo el relajamiento y una mejora significativa en la calidad del sueño. Luego, el paciente con fibromialgia que presente el trastorno del sueño percibe rápidamente esta mejora.
Por tanto podemos enumerar algunos de los muchos beneficios que los pacientes van a obtener con una práctica regular de esta disciplina.
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Mejora la circulación en todo el cuerpo
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Aumenta la absorción de calcio, por lo tanto previene fracturas osteoporóticas
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La musculatura se fortalece y las articulaciones son más flexibles
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Mejora el sueño
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Aumenta flexibilidad sin hacer daños a las articulaciones
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Mejora el estado de ánimo, elimina la ansiedad y combate a la depresión